Este bello municipio de Guerrero resguarda las tradiciones ancestrales, culturales de un pueblo prehispánico que alberga vestigios de arquitectónicos.
En la zona montañosa de guerrero se ubica Huamuxtitlán, un pequeño pueblo custodiado por tres cerros que alcanzan los 2,000 metros sobre el nivel del mar: El capulín, el pajarito y el grande son montañas de belleza incomparable.
El poblado es un lugar muy pintoresco, habitan muchos indígenas que todavía hablan su lengua madre (Náhuatl), viste la ropa tradicional bordados por ellos mismos.
La fiesta grande del pueblo es en honor la Asunción de la Virgen donde con algarabía, bailes, música, juegos artificiales, cuadrillas de danzantes y comida inundan el pueblo todos los años en el mes de agosto.
El nombre de Huamuztitlan viene del náhuatl (Guamuchitlan o cuamochititlan) que significa “entre los guamúchiles). Esta zona arqueológica corresponde al periodo posclásico, según las investigaciones esta zona debió ser más amplia pero en la actualidad solo se conserva una pirámide con escalinata de 26 metros de este a oeste, 21.5 metros al sur y más de 5 metros de altura. Durante las distintas exploraciones se encontraron dos ofrendas, cuentas de jade, cuchillos de pedernal, pintura amarilla, restos de un jaguar y huesos humanos.
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