Troncones es una playa cuyo fuerte oleaje la convierte en un lugar único para surfear en condiciones extremas. Para disfrutar este destino plenamente y evitar riesgos, es importante contar con experiencia previa, no sólo porque está en mar abierto, sino porque el suelo es rocoso y tiene zonas de coral.
La región cuenta con escaso desarrollo turístico, y, aunque sí existen opciones de hospedaje y restaurantes a la orilla del mar, es posible disfrutar noches apacibles y silenciosas, ideales para cerrar una jornada llena de agitación y sobresalto entre las altísimas olas.
También se pueden hacer expediciones para practicar pesca deportiva y excursiones para conocer las cuevas de los alrededores, especialmente la cueva Troncones.
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