El nombramiento de Pueblo Mágico no puede ser mejor aplicado que en Jala donde la medicina tradicional, aprendida en tiempos inmemoriales, sigue presente y viva.
Reconoce la sabiduría ancestral transmitida de padres a hijos desde tiempos remotos, recordando las costumbres prehispánicas entre aromas de copal, ruda y ocote.
Mientras eres sobado por un curandero, conocidos como chamanes o jitéberis, obsérvalo encomendarse a Dios quien creó las plantas que ellos utilizan para armonizar tu espíritu. Sé testigo de cómo estos expertos en herbolaria utilizan las raíces y plantas naturales para transformarlas en ungüentos y pomadas.
Consulta a un médico tradicional para atraer al amor, retirar el mal de ojo o conocer el futuro. Párate en medio de un círculo y siente el alcohol que salpica tu cuerpo y las ramas que purifican y recogen la salación o alguna enfermedad. Observa la lucha entre el bien y el mal en el fuego que cruje y transforma en medio de oraciones que invocan a la madre naturaleza.
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