Río Amacuzac, Morelos; apasionante aventura.

Sin lugar a duda una de las citas anuales de los fanáticos y especialistas en turismo de aventura, se lleva año tras año en diversas y emocionantes jornadas a partir de Huajintlán -municipio deAmacuzac-, que incluyen la práctica de rafting, deporte de aventura que busca el contacto directo con la naturaleza, la protección del entorno natural y una forma diferente de via jar. Pero, sobre todo, divertirse en equipo sin límites ni fronteras.

Estar rodeado de paisajes vírgenes y con un mínimo de habitantes, ha sido un factor determinante para el rescate de Amacuzac, además de que al no contar con asentamientos, entrada de ganado ni quema de bosques se ha evitado la contaminación del río y la reducción de la afluencia de agua. No sólo resulta el sitio ideal para realizar el descenso en río, también se pueden encontrar pequeños mamíferos, como mapaches, águilas, garzas, nutrias, halcones y hasta pumas.

Además, 90% del ecosistema de Morelos se caracteriza como selva baja caducifolia, con una gran diversidad de flora y fauna. Raft México, microempresa privada dedicada a organizar recorridos por la selva baja caducifolia, escaladas en La Roca, cursos de kayak y venta de equipo para rafting, realiza un notorio esfuerzo para atraer turismo nacional e internacional a un destino donde muy pocos saben que se puede practicar deporte de aventura.

Como parte de su programa de apoyo al Amacuzac, la empresa destina 3% de sus ingresos a la conservación y limpieza del río, además de generar fuentes de empleo a universitarios nativos del lugar, quienes están altamente preparados para emprender la aventura. Asimismo, Raft realiza sus compras de alimentos y bebidas a los lugareños las comunidades cercanas a los campamentos o recorridos habituales. Lo primordial es la seguridad de sus usuarios, razón por la cual los jóvenes guías están capacitados para casos de emergencia: cada uno cuenta con el certificado SRT1, conocimientos de primeros auxilios y siempre llevan consigo equipo y bolsa de seguridad, botiquín y agua embotellada. Conscientes de su labor, hacen un recorrido antes de cada inicio de temporada, pues el río cambia constantemente y deben estar siempre alertas para cualquier previsto y mantener el control del grupo.

Entre las medidas de seguridad por parte de los aventureros, es necesario portar siempre el chaleco con flotador en el cuello, el remo y casco, así como llevar un máximo de siete viajeros por cada balsa, incluyendo al guía. Cada vez más personas buscan este tipo de actividades. Además de disfrutar de estos deportes, no debemos olvidar lo importante de respetar siempre la naturaleza, seguir las indicaciones de su guía para aprovechar la experiencia hasta sus últimas consecuencias, pues Morelos es un estado con magia, encanto y diversión.