Un bello teatro en el centro de la ciudad es sede de uno de los festivales culturales más importantes del mundo.
Para poder conocer las ciudades, hay que adentrarnos en su historia y que mejor forma de hacerlo que a través de sus edificios, uno de ellos siendo fundamental, el Teatro Juárez localizado en la hermosa y bellísima ciudad de Guanajuato, está joya arquitectónica mexicana data de finales del siglo XIX.
Su construcción fue iniciada en 1872 por el arquitecto José Noriega, aunque, tras una abrupta interrupción, la obra fue pasada a manos del arquitecto mexicano Antonio Rivas Mercado y de Alberto Malo, quienes fueron los encargados de terminarla. El Teatro tuvo su auge a finales del siglo XIX, hasta el estallido de la Revolución Mexicana, debiéndole su nombre al liberal Benito Juárez.
El acceso al recinto es por medio de una escalinata que tiene labrada en cantera esculturas de leones en bronce y faroles de hierro, pórtico con columnas dóricas en cantera verde y capitel decorado con liras. En el interior, en la planta baja, hay un vestíbulo conformado por columnas de fuste liso y capitel decorado con guirnaldas, del lado izquierdo hay un bar-mostrador, cuyo mobiliario está completamente labrado en madera, lo mismo que la taquilla. El vestíbulo conduce a un área conocida como salón fumador, en esta área encontramos ocho esbeltas bases de tipo pilastras estípites en bronce sobre las que descansan esculturas de Dante, Mozart, entre otras. El auditorio tiene cinco niveles con barandales de hierro, muebles con tapiz rojo y bordado en oro.
En la actualidad este teatro es el principal escenario del Festival Internacional Cervantino desde 1972. Aquí se realizan diversas actividades artísticas, como obras de teatro, ballet, conciertos musicales, exposiciones de pintura y fotografía.
Debe estar conectado para enviar un comentario.