«Si observamos otros nombramientos, con todo respeto, ninguno se compara con esta localidad. Por eso, insistiremos en que Capula merece el título de Pueblo Mágico. Sin embargo, independientemente de la designación, para nosotros es el centro artesanal de Morelia y tiene una importancia fundamental no solo para el municipio sino también para el país debido a su destacada producción de loza y alfarería», afirmó Aquique.
Capula se ha ganado el reconocimiento por su presencia en las mesas mexicanas y por popularizar platillos tradicionales alrededor del mundo. La funcionaria municipal Gloria López Morales, en colaboración con la UNESCO, elaboró un archivo gastronómico de Michoacán, que destaca el trabajo de los artesanos de la región.
«Capula es como un hijo para mí y ha ido creciendo como destino turístico», expresó Aquique, y señaló que no todas las localidades están equipadas para promover el turismo o la inversión en el sector, aunque algunas producen productos relacionados con la gastronomía. Por ejemplo, Mezcal, y es apoyado por el gobierno de Morelia.
Se introducen pasarelas y carteles para acercar a los visitantes y facilitar el trabajo de los creadores. “En comparación con el pasado cuando había transporte gratuito a las ciudades, ahora estamos atrayendo a personas realmente interesadas en el turismo rural, la identidad y los productos locales”, agregó Aquique. Un ejemplo es la degustación de vinata Don Mateo, al alcance de la familia Vieyra con una narrativa única y una agencia de viajes que puede llevar a los visitantes a las localidades de San Miguel y Jesús del Monte.
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